Las escuelas, los padres y la comunidad deben
trabajar juntos para promover el bienestar, el aprendizaje e incluso la salud de
todos los educandos. Cuando las escuelas involucran activamente a los padres y
se aprovechan recursos de la comunidad, todo el grupo es capaz de responder de
manera más eficaz a las necesidades relacionadas con la formación integral de
los niños y niñas.
Formar un gran espacio formativo implica
fomentar las asociaciones entre las escuelas, grupos familiares y comunitarios,
e individuos, lo que da lugar a compartir y maximizar los recursos; y ayudan a
los niños y jóvenes a desarrollar comportamientos saludables y promueven
familias saludables.
Los niños cuyos padres participan en su
educación son más propensos a:
·
Adaptarse
bien a la escuela
·
Asistir a
la escuela con más regularidad
·
Completar
las tareas de forma más consistente
·
Obtener
calificaciones más altas
·
Graduarse
e ir a la universidad
|
·
Tienen
mejores habilidades sociales
·
Mostrar un
mejor comportamiento
·
Tener
mejores relaciones con sus padres
·
Tienen una
mayor autoestima
|
Además, la
vinculación de las actividades de la comunidad con el aula:
·
Mejora las
conductas relacionadas con la escuela
·
Tiene un
impacto positivo de rendimiento académico
|
·
Reduce las
tasas de abandono de la escuela
|
Pueden
conocer a fondo este tema y sus implicaciones haciendo click en los siguientes
links relacionados con los tres hábitats educativos que estamos explorando:
LA ESCUELA:
LA
COMUNIDAD:
Hermoso aporto muchisimas gracias me es de mucha ayuda en mi trabajo como docente
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