Como docentes, en nuestro día a día, dentro del aula de clases tratamos de influir en nuestros niños y niñas de manera que no solo formemos su intelecto sino que también queremos desarrollar su ser integral, por lo que continuamente en las actividades de la vida diaria les mostramos que además de derechos los niños y niñas tienen deberes, no solo en la escuela, sino también en casa. Estos deberes, a menudo se traducen en tareas sencillas de colaboración en el mantenimiento de un ambiente saludable en el hogar. La asignación y cumplimiento de esas tareas les enseña a los niños y niñas el valor de la responsabilidad, cooperación y el sentido de pertenencia; los cuales son reforzados en la escuela a través de nuestra mediación con actividades y estrategias planificadas.
Es por ello que consideramos pertinente proponer este sencillo pero educativo juego para invitar a los padres a jugar junto a sus niños y niñas e instruirlos a temprana edad en estos valores.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario